Cuando vemos “sombra de muerte” se refiere a enfermedad, cuando hablamos de muerte, es la puerta a toda enfermedad.
Hoy en día tenemos una sociedad enferma, como nunca antes. No importa si están dentro o fuera de la Iglesia, ambas están igual de enfermas.
Si la gente de afuera mira a la iglesia, no ve epístolas vivas de la Gloria del Padre. Sus cuerpos y vidas no reflejan la gloria del Padre.
Podremos llamarle iglesia pero ¿es verdaderamente una iglesia? ¿Es verdaderamente por lo que Jesus murió?
El Señor nos esta llamando a una Reforma no solo de nuestro entendimiento sino también de nuestro cuerpo.
Bendiciones amados,
Ana Méndez Ferrell