La esencia del amor es lo que restaura las grietas en el corazón, permitiéndote ofrecerlo en su totalidad.
Esto no significa que no le hayas dado tu corazón a Cristo; has entregado la parte que estaba disponible. Sin embargo, Él desea tu corazón completo.
Para lograrlo, El te invita a escarbar y buscar en lo profundo de tu ser, ya que todos hemos enfrentado situaciones emocionales que han dañado nuestro corazón.
Bendiciones amados,
Ana Méndez Ferrell